Tú naciste para acompañar,servir, cuidar a tu hombre y para criar sus hijos. No debes pensar en otra cosa ni VER, ni por supuesto, SENTIR nada más que no sea tu familia. Es tu deber y si cometes el pecado de ver lo que NO debes, de entrar aquí y pensar lo que sabes es el demonio, tú mirate al espejo y repite: soy feliz, lo tengo todo no neesito nada más, respetaré la vida ajena y me dedicaré a mis deberes. Eso debes hacer, que no querrás que Dios te castige no? Puedes ir en paz por los siglos de los siglos. Amén!!!